Biden cierra temporalmente solicitudes de asilo en la frontera sur para controlar crisis migratoria
El presidente Joe Biden firmó este martes una orden ejecutiva que cerrará temporalmente las solicitudes de asilo una vez que el promedio diario de encuentros supere los 2.500 en los puntos de entrada oficiales. Esta medida, que ya ha entrado en efecto, busca controlar la situación fronteriza hasta que el número de encuentros diarios caiga a 1.500.
La orden ejecutiva de Biden, fundamentada en las secciones 212(f) y 215(a) de la Ley de Inmigración y Nacionalidad, suspende la entrada de no ciudadanos que crucen ilegalmente la frontera sur. Según la administración, esta decisión es necesaria para gestionar la crisis migratoria de manera más efectiva.
La frontera se reabrirá una vez que los encuentros diarios se reduzcan a 1.500. Esta medida ya está en vigor debido a que el umbral de 2.500 encuentros diarios ha sido superado. Según datos oficiales de la Oficina de Aduana y Control Fronterizo (CBP), en el mes de abril se registró un promedio diario de más de 4.200 cruces. La orden también establece que los migrantes que no demuestren un “miedo creíble” serán deportados de inmediato, en cuestión de días u horas.
La orden incluye excepciones para niños no acompañados. Sin embargo, ha recibido críticas tanto de republicanos como de defensores de inmigrantes. El senador republicano Kevin Cramer calificó la medida como insuficiente y tardía, mientras que Lindsay Toczylowski, directora ejecutiva del Immigrant Defenders Law Center, la consideró una traición a las promesas de campaña de Biden de humanizar la frontera.
Se anticipan desafíos legales similares a los enfrentados por la administración Trump en 2018. La orden llega en un momento crucial de la campaña presidencial en EE.UU. y tras una elección presidencial histórica en México, lo que añade una capa de complejidad a la situación.
Mientras tanto, la administración Biden ha establecido vías legales para la entrada de individuos y familias a EE.UU., como la aplicación móvil CBP One y programas de reunificación familiar. Estas medidas complementan la orden ejecutiva, ofreciendo opciones legales para aquellos que buscan ingresar al país.
La aplicación CBP One sigue funcionando con 1.450 citas diarias, permitiendo a los solicitantes de asilo programar entrevistas de manera más ordenada y evitando cruces ilegales. La administración confía en que estas medidas reducirán la presión en la frontera y ofrecerán soluciones más humanas y ordenadas.
Las encuestas recientes muestran que Donald Trump mantiene una ventaja significativa en la percepción de los votantes sobre quién maneja mejor la inmigración y la seguridad fronteriza. Esta ventaja incluye una diferencia notable entre los votantes latinos, quienes ven en Trump una figura más fuerte en temas de seguridad.
La situación en la frontera sur sigue siendo una de las principales preocupaciones de los ciudadanos y una cuestión central en la política estadounidense. La administración Biden deberá navegar este complejo escenario mientras busca equilibrar las promesas de campaña con las realidades prácticas y políticas de la gestión fronteriza.
Se espera que las próximas semanas sean críticas para evaluar la efectividad de estas medidas y para observar cómo se desarrollan los desafíos legales que podrían surgir. La comunidad internacional también sigue de cerca los acontecimientos, ya que la situación migratoria en Estados Unidos tiene repercusiones más allá de sus fronteras.