Congreso de Estados Unidos certifica la victoria presidencial de Donald Trump ante Kamala Harris
El Congreso de Estados Unidos confirmó oficialmente la victoria de Donald Trump en las elecciones presidenciales de 2024 durante una sesión conjunta celebrada este jueves. La certificación, anunciada por la vicepresidenta Kamala Harris en su calidad de presidenta del Senado, otorga al magnate republicano 312 votos electorales frente a los 226 de Harris, quien también fue candidata en los comicios de noviembre.
El proceso se desarrolló sin incidentes, marcando un contraste con los tumultuosos eventos de 2021, cuando una turba de simpatizantes de Trump irrumpió en el Capitolio para interrumpir la certificación de su derrota. Esta vez, la sesión avanzó de manera ordenada, con la presencia de los 435 miembros de la Cámara de Representantes y los 100 senadores.
Antes de la ceremonia, Harris subrayó que cumplir con su papel era “un derecho constitucional”, haciendo énfasis en su deber institucional de presidir la certificación de la victoria de su contrincante. La sesión se desarrolló en un Capitolio bajo fuertes medidas de seguridad, y los legisladores, pese a una tormenta de nieve que azotaba Washington, permanecieron en la ciudad, acatando las instrucciones del presidente de la Cámara de Representantes, Mike Johnson.
La certificación fue llevada a cabo por cuatro escrutadores: los representantes Bryan Steil (R-WI) y Joe Morelle (D-NY), y las senadoras Deb Fischer (R-NE) y Amy Klobuchar (D-MN). Cada uno leyó los resultados estatales en orden alfabético. Aunque cualquier legislador tenía la opción de presentar objeciones respaldadas por al menos una quinta parte de ambas cámaras, no se registraron impugnaciones en esta ocasión.
Tras la lectura de los resultados, Harris proclamó el desenlace final y disolvió la sesión conjunta, cerrando el capítulo formal del proceso electoral. Esta transición pacífica refuerza la importancia de las instituciones democráticas, destacaron analistas políticos.
Durante la campaña, Trump prometió que, de regresar al poder, indultaría a los involucrados en los disturbios de 2021, en los que fallecieron cinco oficiales y cuatro manifestantes. Esta postura ha generado intensos debates sobre el alcance de su futura administración y las posibles repercusiones en la política interna.
El proceso de certificación presidencial ha sido tradicionalmente una formalidad, pero en los últimos años ha adquirido un simbolismo mayor. Harris no es la primera vicepresidenta en certificar la victoria de un rival político; en 2017, Joe Biden oficializó el triunfo de Trump, y en 2000, Al Gore supervisó la certificación de la estrecha victoria de George W. Bush.
En su discurso de cierre, Harris expresó que la democracia requiere resiliencia y cooperación, instando a los legisladores a trabajar en conjunto por el bienestar del país, independientemente de las diferencias políticas. La sesión concluyó en calma, sentando un precedente de respeto a los procedimientos constitucionales.
