Cubanos con I-220A no están obligados a registrarse ante ICE si tienen proceso legal

El abogado de inmigración Wilfredo Allen aclaró que los cubanos en Estados Unidos con el documento I-220A no están obligados a registrarse ante el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) si se encuentran en un proceso legal. En medio de la incertidumbre migratoria que afecta a más de medio millón de cubanos en el país, Allen brindó una serie de recomendaciones para evitar problemas legales y garantizar su residencia.
El especialista subrayó que hasta el momento no se han registrado deportaciones masivas de cubanos con I-220A que no hayan cometido delitos. Aseguró que quienes cumplen las normas y carecen de antecedentes penales tienen altas probabilidades de regularizar su estatus migratorio.
Sin embargo, advirtió que aquellos con antecedentes criminales o con una orden de deportación previa enfrentan un mayor riesgo de ser expulsados. Por ello, recomendó a los migrantes revisar su estatus legal y cumplir con todas las disposiciones establecidas por las autoridades.
Allen aconsejó a los cubanos con I-220A que opten por la residencia a través de la Ley de Ajuste Cubano en lugar de insistir en el asilo, salvo que sea estrictamente necesario. Destacó que esta vía es más estable y rápida para alcanzar la legalización definitiva.
Asimismo, explicó que los cubanos que ingresaron con CBP One y recibieron parole también pueden acogerse a la Ley de Ajuste Cubano. Insistió en la importancia de iniciar los trámites sin demora, ante posibles cambios en la política migratoria.
El abogado alertó sobre la necesidad de verificar la situación legal en la corte de inmigración. Algunas solicitudes de asilo han sido “cerradas administrativamente”, lo que puede generar confusión. En estos casos, es fundamental confirmar si hay una fecha de audiencia pendiente, ya que faltar a una cita judicial podría derivar en una orden de deportación.
Para quienes ya han solicitado la residencia, Allen recomendó paciencia. Reconoció que los procesos han sido ralentizados, pero aseguró que todos los cubanos que ingresaron legalmente al país eventualmente podrán legalizarse.
Además, mencionó que muchas familias cubanas han sido separadas debido a la falta de uniformidad en la documentación otorgada en la frontera. Algunos recibieron parole, mientras que otros obtuvieron el I-220A, lo que ha complicado los procesos de ajuste de estatus.
A pesar de estas dificultades, instó a los afectados a seguir con sus solicitudes y mantener la calma mientras las autoridades resuelven los problemas administrativos.
Sobre su reciente controversia con la congresista María Elvira Salazar, Allen enfatizó la necesidad de acciones administrativas en el Congreso para atender la situación de los cubanos con I-220A. Afirmó que una legislación específica para este grupo es poco probable, pero existen medidas administrativas que podrían ofrecer soluciones a largo plazo.
El abogado concluyó que la comunidad cubana debe mantenerse informada y asesorarse con expertos en inmigración para tomar decisiones acertadas y evitar riesgos innecesarios.