Luis Miranda, subsecretario adjunto de comunicaciones del Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos (DHS), hizo nuevas declaraciones respecto al parole humanitario y el uso de la aplicación CBP One. El programa, que beneficia a migrantes cubanos, venezolanos, nicaragüenses y haitianos, sigue operando tras una breve pausa para combatir el fraude.
Desde enero de 2023, el parole humanitario ha permitido a migrantes de estos países ingresar legalmente a EE.UU. sin exponerse a rutas peligrosas. Miranda destacó que el programa procesa 30.000 personas al mes, una cifra limitada frente a la alta demanda.
El subsecretario aseguró que el sistema se ha diseñado para ser equitativo. A pesar de que algunos migrantes han esperado más tiempo, no existe un plazo fijo para la resolución de sus casos. Los interesados pueden consultar el estatus de su solicitud en el portal del Servicio de Ciudadanía e Inmigración (USCIS).
El parole humanitario tiene una duración máxima de dos años. Para los cubanos, existe la posibilidad de ajustar su estatus bajo la Ley de Ajuste Cubano. Otros, como los venezolanos, deberán recurrir a opciones como el asilo o el TPS (Estatus de Protección Temporal), renovado en 2023.
Durante su intervención, Miranda evitó hacer comentarios sobre las declaraciones de Donald Trump, quien ha propuesto eliminar el parole y el sistema de citas de CBP One en caso de ganar las elecciones. No obstante, enfatizó que cualquier cruce ilegal de la frontera seguirá siendo ilegal, con consecuencias como la deportación y la prohibición de reingreso por al menos cinco años.
Sobre el uso de la aplicación CBP One, Miranda aclaró que solo funciona desde México. Las personas deben estar en los estados de Tabasco, Chiapas o Ciudad de México para acceder a una cita de asilo. Los ciudadanos de Cuba, Venezuela, Nicaragua y otros países no pueden solicitar la cita desde sus lugares de origen.
Ante la duda de si tener una solicitud de parole interfiere con una solicitud de visa, Miranda aclaró que ambos son trámites independientes. Esto significa que una persona puede solicitar ambas opciones sin que una afecte a la otra.
El parole humanitario, según explicó Miranda, no es prorrogable. Los migrantes deben regularizar su situación en EE.UU. antes de que finalice el plazo de dos años o abandonar el país.
