El precio del dólar estadounidense en el mercado informal cubano experimentó un notable descenso este 8 de julio, situándose en 340 pesos cubanos (CUP), tres pesos menos que el día anterior. Esta caída se suma a una serie de disminuciones continuas desde que la divisa alcanzó casi los 400 CUP hace unas semanas.
El estudio diario realizado por el medio independiente El Toque confirma la estabilidad del euro en 350 CUP y la caída de la Moneda Libremente Convertible (MLC) hasta los 295 CUP. Estos movimientos se dan en un contexto marcado por la reciente implementación de la Resolución 225 del Ministerio de Finanzas y Precios (MFP).
La Resolución 225 establece precios topados para la venta minorista de seis productos básicos importados por las micro, pequeñas y medianas empresas (Mipymes) cubanas. Esta normativa fija un tope máximo del 30% en el margen comercial de dichos productos, lo que, según expertos, impactará significativamente en el comercio exterior del sector no estatal.
El sector no estatal es responsable del 44% de las ventas minoristas en Cuba, y la imposición de este tope de precios podría resultar en la escasez de artículos de primera necesidad como el pollo troceado, aceites comestibles, leche en polvo, pastas alimenticias, salchichas y detergente en polvo. La medida ha generado preocupación entre los importadores y consumidores cubanos.
La reducción en las importaciones por parte de las Mipymes afectará la demanda de dólares en el mercado informal, dado que estas empresas necesitan la divisa para adquirir productos en el extranjero. El economista cubano Pedro Monreal expresó en su cuenta de la red social X que los topes de precios históricamente no han funcionado en Cuba, llevando a una “inflación reprimida” y desabastecimiento.
Monreal advirtió que la contención de precios establecida en documentos oficiales frecuentemente resulta en precios elevados en el mercado negro y escasez de productos. Asimismo, calificó de “error” el enfoque burocrático en el cálculo económico en lugar de un sistema basado en precios de mercado, lo cual podría agravar la situación económica del país.
Las autoridades cubanas han justificado la Resolución 225 como una medida necesaria para proteger a los consumidores y estabilizar el mercado interno. Sin embargo, la respuesta del mercado informal y la comunidad empresarial ha sido de cautela y escepticismo, anticipando efectos negativos en la disponibilidad de productos.
El impacto de estas medidas será monitoreado de cerca en las próximas semanas, ya que las Mipymes y otros actores económicos ajustan sus operaciones a las nuevas regulaciones. La expectativa es que, a corto plazo, los precios de los productos afectados podrían sufrir fluctuaciones significativas.
La caída del dólar a 340 CUP y la disminución del MLC a 295 CUP reflejan la incertidumbre en el mercado informal. A medida que las políticas económicas del gobierno cubano evolucionan, la población enfrenta un panorama económico complejo y desafiante.
La comunidad cubana en el extranjero sigue con atención estos desarrollos, conscientes de su impacto en familiares y amigos en la isla. Las remesas y el apoyo financiero externo continúan siendo fundamentales para muchas familias cubanas, especialmente en tiempos de cambios económicos y regulatorios.
