El Ministerio de Economía y Planificación (MEP) de Cuba ha dado un paso significativo en el panorama económico de la isla al aprobar un total de 122 nuevas solicitudes para la creación de Micro, Pequeñas y Medianas Empresas (Mipymes). Esta decisión, que suma un total de 11,240 Mipymes desde el inicio de la flexibilización en septiembre de 2021, refleja un intento por diversificar la economía cubana en medio de las adversas condiciones económicas del país.
La distribución geográfica de estas nuevas Mipymes, principalmente ubicadas en La Habana, Granma, Matanzas y Holguín, refleja la densidad poblacional y la infraestructura para el emprendimiento en estas provincias. Desde servicios de construcción y gastronomía hasta transporte de carga y programación informática, estas empresas están transformando el panorama comercial en las grandes ciudades cubanas.
El Gobierno Cubano espera que estas Mipymes no solo generen empleos, sino que también aumenten los sueldos, superando significativamente los estatales. Sin embargo, la realidad es que la mayoría de estas empresas no aporta valor agregado, dedicándose mayormente a la comercialización de productos importados, según datos oficiales.
Aunque se espera que estas empresas contribuyan al Producto Interno Bruto (PIB) del país, las restricciones gubernamentales aún limitan su participación en sectores claves como la salud, las telecomunicaciones y los medios de comunicación. Esto ha llevado a un aporte limitado al PIB, reflejando la necesidad de una mayor apertura económica en la isla.
La existencia de más de 11 mil Mipymes en Cuba representa un cambio significativo en el escenario económico del país, históricamente dominado por la empresa estatal socialista. Sin embargo, estas empresas han tenido que enfrentarse a un entorno económico cada vez más desafiante, incluyendo la constante subida del precio del dólar, lo que ha generado críticas tanto por precios especulativos como por posibles vínculos con la élite política.
La importancia de las Mipymes en países en desarrollo como Cuba radica en su contribución al empleo y al PIB nacional. En muchos casos, estas empresas representan una parte significativa del empleo y del PIB, destacando su papel crucial en la economía cubana y su potencial para impulsar el crecimiento económico en el futuro.
En resumen, la aprobación de más de 120 nuevas Mipymes en Cuba marca un hito en el camino hacia una economía más diversificada y próspera. Sin embargo, para que estas empresas puedan alcanzar su máximo potencial, será necesario abordar los desafíos económicos y políticos que aún enfrenta la isla.