
La ciudad de Hialeah anunció un programa para reducir los costos del servicio de agua potable. La medida arranca el 1 de noviembre y aplica al uso doméstico exterior mediante la instalación de nuevos medidores, informó Univisión.
En su primera fase, el plan se dirige a propietarios de 65 años o más con ingresos bajos. Las autoridades prevén un ahorro mensual significativo para este grupo en sus facturas.
El programa busca evitar cargos adicionales a quienes usan agua para riego de jardines, llenado de piscinas o mantenimiento de áreas verdes. El segundo medidor separará ese consumo del uso dentro del hogar.
Con esta separación, el usuario podrá identificar qué parte de su consumo corresponde a actividades exteriores. La facturación reflejará esa diferencia. La iniciativa se suma a reformas recientes impulsadas por la alcaldesa interina, Jacqueline García-Roves. El objetivo es aliviar la carga económica de los residentes.
En septiembre, el Concejo Municipal eliminó el cargo de franquicia en agua potable y alcantarillado. La alcaldía respaldó la decisión. Ese cargo aparecía en la Sección 94-163 del Código de Ordenanzas. Se aplicaba como un porcentaje sobre el total de la factura de agua y alcantarillado.
En los últimos años, el porcentaje rondaba el 4%. Por ejemplo, una factura bimestral de 250 dólares incluía unos 10 dólares extra por franquicia. Según la ciudad, la eliminación del cargo supone un ahorro anual de unos 3.7 millones de dólares para los hogares. El impacto se distribuye entre los usuarios del sistema.
Para un hogar que paga 250 dólares bimestrales, el ahorro anual estimado es de 60 dólares. Si la factura bimestral es de 150 dólares, el ahorro sería de unos 36 dólares al año. Las autoridades sostienen que estas medidas apoyan a la comunidad ante el aumento del costo de vida. Buscan reducir gastos en servicios públicos esenciales.