
Los descendientes de españoles que inicien su trámite de nacionalidad bajo la Ley de Memoria Democrática antes del 25 de octubre de 2025 podrán completar el proceso hasta el año 2028, según una nueva instrucción del Ministerio de Asuntos Exteriores de España.
La medida busca mitigar el colapso en los consulados y garantizar que quienes hayan obtenido una cita dentro del plazo legal puedan finalizar su expediente.
El Gobierno español tomó esta decisión debido a la alta demanda y las dificultades para gestionar turnos en los consulados, especialmente en países como Argentina, Cuba y Venezuela. En muchos casos, los solicitantes han recibido citas para finales de 2026 e incluso 2027, lo que hacía incierto el futuro de sus expedientes. Con la nueva directriz, bastará con haber registrado la cita antes de la fecha límite para asegurar la continuidad del trámite.
Para acceder a la prórroga, es obligatorio solicitar una cita antes del 25 de octubre de 2025 a través de los sistemas telemáticos consulares. La confirmación generará un justificante, que servirá como respaldo para completar el proceso en años posteriores mediante la entrega de documentos adicionales.
En respuesta a la crisis en la gestión de turnos, el Gobierno de España trabaja en una aplicación digital que permitirá registrar oficialmente la solicitud de cita. Esta herramienta garantizará que quienes inicien el trámite dentro del plazo legal no sean perjudicados por las demoras administrativas y puedan completar su expediente hasta 2028.
La Ley de Memoria Democrática, conocida popularmente como la Ley de Nietos, permite a ciertos descendientes de españoles solicitar la nacionalidad sin necesidad de residir en España. Entre los beneficiarios se incluyen los nietos de españoles exiliados por la Guerra Civil o la dictadura franquista, los hijos de españoles que perdieron su nacionalidad al naturalizarse en otro país antes de 1978 y los hijos de mujeres españolas que la perdieron por casarse con extranjeros antes de la reforma constitucional de 1978.
La norma también ampara a los hijos mayores de edad de quienes obtuvieron la nacionalidad por la Ley de Memoria Histórica de 2007, quienes quedaron excluidos en aquella regulación. En todos los casos, los solicitantes deben acreditar su filiación mediante actas de nacimiento y documentos que demuestren el vínculo con el ascendiente español.
Además del impacto de esta prórroga, el Consejo General de la Ciudadanía Española en el Exterior (CGCEE) impulsa un proyecto de reforma del Código Civil para facilitar el acceso a la nacionalidad. La propuesta plantea eliminar límites de edad, permitir la recuperación de la ciudadanía y reconocer a los descendientes de mujeres españolas afectadas por normativas discriminatorias del pasado.
Uno de los cambios más relevantes que propone el CGCEE es la posibilidad de obtener el Documento Nacional de Identidad (DNI) en los consulados sin necesidad de viajar a España, un proceso que actualmente requiere presencia física en territorio español. Aunque el proyecto cuenta con respaldo político, su aprobación aún está en trámite.
Para los cubanos descendientes de españoles, la nacionalidad española representa una oportunidad clave para acceder a mejores condiciones de vida. Obtener el pasaporte europeo permite trabajar en España y circular libremente por la Unión Europea, facilitando opciones de empleo y residencia en distintos países del continente.
El plazo formal de la Ley de Nietos sigue vigente hasta octubre de 2025, pero la reciente ampliación del margen para completar expedientes hasta 2028 ofrece un alivio a quienes han enfrentado dificultades para obtener turnos consulares. Con esta prórroga, miles de solicitantes podrán gestionar su ciudadanía española sin temor a que el proceso quede interrumpido.