El Banco Central de Cuba (BCC) informó que en agosto de 2024 se realizaron más de nueve mil millones de pesos en transacciones electrónicas. Alberto Quiñones Betancourt, vicepresidente del BCC, destacó estos resultados como un logro de la campaña de bancarización impulsada por el gobierno, en medio de la crisis de efectivo que afecta la economía del país.
Durante el mes de agosto, se procesaron tres millones 582 mil 761 transacciones electrónicas, alcanzando un valor de nueve mil 121 millones de pesos. Esto representa un incremento del 4% en comparación con el mes anterior, julio de 2024. Desde enero de 2023, la cantidad de tarjetas magnéticas en circulación ha crecido de siete a doce millones, lo que ha facilitado el uso de plataformas como EnZona y Transfermóvil.
Estas plataformas electrónicas manejaron el 74.1% de los pagos de tributos en julio, lo que evidencia su creciente aceptación entre los usuarios cubanos. La campaña de bancarización ha sido una respuesta del gobierno para enfrentar la escasez de efectivo, imponiendo la obligatoriedad a los comercios de contar con sistemas de cobro digitales.
Sin embargo, a pesar de los avances, las empresas estatales siguen rezagadas en la adopción de la medida. De acuerdo con Quiñones Betancourt, solo el 30% de los ingresos de estas empresas se tramitan de manera digital, lo que calificó como “inaceptable”. El vicepresidente subrayó que es fundamental que se eliminen las negativas a cobrar de manera digital para garantizar la efectividad del sistema.
Por otro lado, la situación del crédito en Cuba sigue presentando limitaciones significativas. Los bancos cubanos no ofrecen créditos hipotecarios para la compra o reparación de viviendas, según declaraciones de Ileana Estévez Bertematy, asesora del BCC. El sistema financiero cubano se enfoca principalmente en financiar actividades productivas y de servicios, tales como la agricultura y la industria manufacturera.
Estévez explicó que más del 97% de los préstamos otorgados se destinan a sectores productivos, mientras que solo entre el 2% y el 3% de los financiamientos van a personas naturales, incluidos trabajadores por cuenta propia y agricultores.
La agricultura, uno de los sectores clave en la economía cubana, se beneficia de varias formas de financiamiento, como cooperativas y la recién creada Banca de Fomento Agrícola. Este banco apoya a los productores prioritarios con tasas de interés subsidiadas, pero la crisis económica ha afectado gravemente al sector, lo que ha obligado a los bancos a reprogramar préstamos y restringir nuevas operaciones.
El BCC no solo regula las transacciones y préstamos, sino que también supervisa las operaciones de diez bancos comerciales, quince instituciones financieras no bancarias y varias oficinas de representación de bancos extranjeros. Esta supervisión es clave para mantener el control sobre el sistema financiero de la isla, consolidando al Banco Central como la principal entidad financiera en Cuba.
