Trump elimina beneficios federales para inmigrantes ilegales: estos son los programas afectados

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó una orden ejecutiva que elimina todos los beneficios financiados con impuestos federales para inmigrantes ilegales. La medida obliga a agencias gubernamentales a identificar y eliminar programas que proporcionen asistencia a extranjeros sin estatus legal, alineándose con la política migratoria de la administración republicana.
La Casa Blanca justificó la decisión argumentando que busca priorizar el uso de recursos públicos en ciudadanos estadounidenses, incluyendo veteranos y personas con discapacidad. Asimismo, la orden prohíbe el uso de fondos federales por parte de estados y ciudades santuario para respaldar políticas que faciliten la permanencia de inmigrantes sin documentos.
El decreto también endurece los mecanismos de verificación de elegibilidad para evitar que personas sin estatus legal accedan a subsidios financiados con impuestos. Entre los programas afectados figuran Medicaid, cupones de alimentos, subsidios de vivienda y asistencia en emergencias.
La administración Trump sostiene que la crisis migratoria ha generado un gasto millonario para los contribuyentes. Según el Center for Immigration Studies (CIS), proporcionar bienestar a un millón de inmigrantes ilegales cuesta anualmente 3.000 millones de dólares. Además, un informe del Comité de Seguridad Nacional de la Cámara de Representantes calcula que desde 2021 se han destinado $451.000 millones a la atención de migrantes indocumentados.
Datos de la Federación para la Reforma de la Inmigración Estadounidense (FAIR) señalan que el costo total de la presencia de inmigrantes ilegales en EE.UU. asciende a $182.000 millones al año, impactando los presupuestos estatales y locales. La orden ejecutiva busca reducir esta carga fiscal.
Entre los beneficios eliminados se encuentran la asistencia médica de emergencia financiada por Medicaid, subsidios de alimentación del Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria (SNAP) y programas de vivienda pública. Asimismo, los fondos de FEMA destinados a refugios de emergencia podrían ser restringidos, afectando a inmigrantes en crisis humanitarias.
También se verán afectados programas de educación infantil y cuidado temprano como Head Start, así como clases de inglés y educación para adultos. Además, organizaciones que brindan asesoría legal gratuita a migrantes en procesos de asilo perderán financiamiento federal.
La política también recorta fondos para hospitales que atienden a inmigrantes sin papeles, programas de salud pública para enfermedades infecciosas y subvenciones a ciudades santuario. La Casa Blanca sostiene que estas restricciones refuerzan la seguridad y estabilidad económica del país.
Además de esta orden ejecutiva, Trump ha impulsado medidas como la declaración de emergencia nacional en la frontera sur para desplegar a las Fuerzas Armadas y la reanudación de la construcción del muro fronterizo. También ha catalogado a grupos criminales como MS-13 y Tren de Aragua como organizaciones terroristas internacionales.
Una de las acciones más polémicas es la detención de inmigrantes ilegales con antecedentes penales en la prisión de Guantánamo, medida que busca disuadir la inmigración masiva. La decisión ha generado críticas de organizaciones de derechos humanos y líderes demócratas.