USCIS refuerza medidas contra fraude en peticiones familiares: Entrevistas más frecuentes y documentación adicional exigida

El Servicio de Ciudadanía e Inmigración de los Estados Unidos (USCIS) ha implementado un nuevo enfoque para detectar fraudes en las peticiones familiares I-130, según alertó el consultor de inmigración Abel Zaldívar. Esta medida, que busca aumentar la seguridad en los procesos migratorios, incluye un escrutinio más riguroso de los casos relacionados con ajustes de estatus y residencias por matrimonio.
Zaldívar explicó que uno de los cambios más notables es el incremento de entrevistas, incluso en casos que antes no requerían este procedimiento. USCIS ahora lleva a cabo entrevistas para verificar la autenticidad de las relaciones, asegurándose de que no existan solicitudes fraudulentas. Esta tendencia ha generado preocupación entre quienes están en proceso de ajuste de estatus por matrimonio.
Como parte de esta vigilancia intensificada, USCIS ha comenzado a exigir pruebas adicionales para confirmar la legitimidad de las relaciones. Entre los documentos solicitados se incluyen actas de matrimonio, pruebas de convivencia, fotografías, cuentas bancarias compartidas y testimonios de familiares y amigos cercanos. La recopilación de estos elementos se ha vuelto un requisito esencial para aquellos que buscan obtener una residencia basada en matrimonio.
Un ejemplo destacado por Zaldívar involucra a una pareja cuya petición I-130 fue inicialmente rechazada debido a la falta de respuesta a un “request for evidence” (RFE). Tras la reapertura del caso y la presentación de más pruebas, la solicitud fue finalmente aprobada después de asistir a varias entrevistas. Este caso subraya la importancia de responder adecuadamente a los RFEs y de mantener evidencia de todos los documentos presentados ante USCIS.
El consultor también enfatizó que los solicitantes deben asegurarse de tener toda la documentación necesaria organizada y preparada para posibles entrevistas. La correcta presentación de pruebas puede marcar la diferencia entre la aprobación o el rechazo de una solicitud.
Por otro lado, Zaldívar también resolvió algunas dudas comunes relacionadas con el proceso migratorio. Uno de los casos más inusuales que mencionó fue el de un esposo peticionario que recibió una entrevista en Estados Unidos para un proceso consular. Generalmente, estas entrevistas se realizan en la embajada correspondiente, por lo que es recomendable verificar si se trataba de un caso manejado por USCIS.
Respecto a los tiempos de procesamiento, Zaldívar indicó que, si una I-130 fue presentada en marzo de 2024, la aprobación podría tardar aproximadamente 17 meses, lo que significaría recibirla entre julio y agosto de 2025. Sin embargo, destacó que los tiempos pueden variar según diferentes factores, como el consulado que maneja el caso.
En cuanto a los casos de familiar inmediato, Zaldívar señaló que si la I-130 para un esposo fue presentada el 5 de junio de 2024, se espera que sea aprobada en alrededor de 13 meses, es decir, a mediados o finales de 2025.
Además, abordó la posibilidad de solicitar una visa de visitante en casos excepcionales, como cuando el esposo ha tenido una cirugía mayor. En estos casos, es posible solicitar la visa si se puede demostrar que la esposa es la única persona disponible para cuidar a su esposo durante su recuperación.
Zaldívar también respondió preguntas frecuentes sobre otros aspectos del proceso migratorio. Por ejemplo, si se trata de un perdón I-601A, destacó que el proceso está tardando aproximadamente 30 meses, por lo que la aprobación podría darse a finales de 2025.
Este enfoque reforzado por USCIS refleja un esfuerzo por aumentar la seguridad en los procedimientos migratorios, especialmente para prevenir el fraude en las solicitudes de ajuste de estatus por matrimonio. Los solicitantes deben estar preparados para enfrentar un proceso más exhaustivo y garantizar la autenticidad de sus relaciones a través de la documentación adecuada.