Argentina endurece su política migratoria: nuevos requisitos golpean a migrantes cubanos

El gobierno de Argentina anunció este miércoles una amplia reforma migratoria que endurece las condiciones de residencia y ciudadanía, impone restricciones a migrantes irregulares y obliga al pago de servicios públicos a quienes no estén regularizados. La nueva normativa, que será implementada mediante un Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU), afecta directamente a miles de extranjeros, incluidos ciudadanos cubanos que viven o planean emigrar al país sudamericano.
El anuncio fue realizado por el vocero presidencial, Manuel Adorni, y la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, quienes argumentaron que la medida responde a un “descontrol migratorio” acumulado durante décadas. El presidente Javier Milei ya había anticipado su intención de diferenciar entre extranjeros que “aportan” a la economía y aquellos que “abusan del sistema”.
Una de las disposiciones más severas es la prohibición de entrada a cualquier extranjero con antecedentes penales, incluso si la condena no supera los tres años. Además, quienes crucen ilegalmente por pasos fronterizos no habilitados o hayan sido condenados por delitos en el país podrán ser expulsados de inmediato.
En cuanto al acceso a la residencia y ciudadanía, solo podrán optar por estos derechos quienes hayan vivido legalmente en Argentina durante al menos dos años ininterrumpidos o realicen inversiones significativas. Las personas en situación migratoria irregular quedarán automáticamente excluidas del proceso.
Otra novedad polémica es que los migrantes temporales o irregulares deberán pagar por los servicios públicos de salud y por la educación universitaria. También se exigirá un seguro médico privado como requisito de ingreso al país, con el objetivo —según el gobierno— de evitar que migrantes accedan de forma fraudulenta al sistema sanitario gratuito.
La reforma impacta especialmente a comunidades como la cubana, que en los últimos años ha encontrado en Argentina un destino viable para escapar de la aguda crisis económica y social que atraviesa la Isla bajo un régimen comunista. Aunque no existen cifras oficiales precisas sobre el número de cubanos residentes, se estima que son una minoría frente a otros grupos como paraguayos, bolivianos y peruanos.
Según datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) y del Registro Nacional de las Personas (RENAPER), más de 3 millones de extranjeros poseen Documento Nacional de Identidad (DNI) digital en Argentina. De ellos, 1,7 millones habrían ingresado de forma irregular en las últimas dos décadas.
La situación también se refleja en el sistema penitenciario. De acuerdo con cifras oficiales, los extranjeros representan el 6% de la población carcelaria federal (6.644 personas) y un 45% en las cárceles de la provincia de Buenos Aires. Además, cerca del 40% de esos reclusos no contaban con una condena firme al momento del registro.
Las universidades argentinas podrán cobrar matrícula a estudiantes extranjeros con estatus temporal, aunque se mantiene la gratuidad para los niveles inicial, primario y secundario.
Esta reforma representa un cambio radical frente a la política migratoria histórica del país, conocida por su enfoque más inclusivo. La nueva dirección adoptada por el gobierno de Milei podría cerrar una puerta crucial para muchos cubanos que buscan un refugio en el extranjero.