Cubanos con orden I-220B ganan demanda y allanan el camino hacia la residencia permanente
Un grupo de 20 cubanos que enfrentaban la deportación en Estados Unidos logró evitar su retorno a Cuba tras obtener un parole otorgado por un juez federal. La decisión se alcanzó luego de una demanda colectiva presentada por los abogados Mark Prada y Claudia Cañizares. El fallo permite que los beneficiados puedan solicitar la residencia permanente amparados en la Ley de Ajuste Cubano.
El proceso legal, que se extendió durante dos meses, culminó con éxito para los demandantes, según reportó Telemundo 51. Los cubanos afectados habían sido liberados por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) bajo la orden I-220B, un documento que establece una orden de deportación diferida.
Claudia Cañizares explicó que, aunque inicialmente se contempló una demanda colectiva más amplia, la falta de participantes condujo a una acción grupal. “Este fallo no aplica a todos los cubanos con I-220B, pero sienta un precedente importante para quienes decidan luchar por vía judicial”, detalló la abogada.
El grupo liberado estaba compuesto por cubanos en distintas etapas del proceso migratorio. Algunos habían pasado por entrevistas de miedo creíble que fueron rechazadas, mientras que otros aún esperaban la evaluación de sus casos. Un tercer subgrupo había sido liberado bajo fianza tras aprobar el miedo creíble.
La clave del caso, según Cañizares, fue argumentar que los cubanos liberados con una I-220B o bajo fianza estaban, en la práctica, bajo un parole, figura que les permite optar por el ajuste de estatus tras un año y un día en territorio estadounidense. La Ley de Ajuste Cubano facilita este proceso para ciudadanos de la isla.
El fallo judicial no solo resuelve la situación de los 20 demandantes, sino que abre una puerta legal para otros cubanos en circunstancias similares. “Estamos evaluando presentar una segunda demanda. Existen muchos cubanos en esta situación que podrían beneficiarse de una acción similar”, señaló Mark Prada.
Los abogados instaron a los cubanos con orden I-220B a contactar con su firma para analizar la viabilidad de nuevos casos. “Cada situación es distinta, pero los resultados obtenidos muestran que es posible avanzar en la defensa de sus derechos”, afirmó Prada.
El juez federal que llevó el caso destacó la importancia de las negociaciones con el gobierno, las cuales permitieron alcanzar un acuerdo favorable. El proceso, descrito como complejo, fue visto como una victoria significativa dentro de la comunidad migrante cubana.
Cabe destacar que ninguno de los 20 cubanos estaba siendo procesado en cortes de inmigración, lo que facilitó que el caso avanzara con mayor rapidez. Este elemento fue determinante para lograr el parole sin mayores trabas administrativas.
Aunque la decisión no se extiende a cubanos con el documento I-220A, Prada y Cañizares resaltaron que el fallo establece un camino para futuras acciones legales. “Seguiremos luchando por aquellos que buscan permanecer en EE.UU. bajo los amparos legales disponibles”, concluyó Cañizares.
Este resultado representa una esperanza para cientos de cubanos que enfrentan incertidumbre migratoria, consolidando el papel crucial que juegan las vías legales en la defensa de los derechos de los inmigrantes.
