Dominicano obtiene residencia en EEUU en tiempo récord gracias a la Ley de Ajuste Cubano
Un dominicano, identificado como Starlin, logró obtener su residencia permanente en Estados Unidos en menos de dos meses bajo la Ley de Ajuste Cubano. El proceso, que comenzó el 7 de noviembre de 2024 y concluyó el 3 de enero de 2025, destaca las ventajas de esta normativa para familiares inmediatos de ciudadanos cubanos, sin importar su nacionalidad.
Starlin ingresó irregularmente a territorio estadounidense en 2022 y enfrentaba complicaciones legales debido a la expiración de su estatus de “parole” tras 60 días. Inicialmente, su solicitud de ajuste de estatus fue rechazada por el Servicio de Ciudadanía e Inmigración (USCIS). Sin embargo, la asesoría especializada del abogado de inmigración Abel Zaldívar permitió aprovechar la Ley de Ajuste Cubano y resolver su caso.
“Estoy agradecido con el equipo del señor Zaldívar. Su orientación y conocimiento de esta ley cambiaron mi vida”, expresó Starlin en un video compartido en redes sociales. El abogado destacó que este caso subraya la importancia de conocer las opciones legales disponibles para los migrantes en situaciones vulnerables.
La Ley de Ajuste Cubano, promulgada en 1966, permite a migrantes cubanos y sus familiares directos ajustar su estatus migratorio tras un año de presencia física en Estados Unidos. Aunque comúnmente asociada solo con cubanos, también beneficia a esposos, esposas e hijos menores de 21 años de ciudadanos cubanos, como ocurrió en este caso.
Una de las ventajas clave de esta normativa es la exención de la forma I-864, un requisito financiero que complica otras solicitudes familiares. Esta flexibilidad facilita el proceso para quienes no cuentan con ingresos elevados o patrocinadores adicionales.
En el caso de Starlin, la ley permitió evitar una espera de tres años, el tiempo que habría tardado su esposa cubana en obtener la ciudadanía estadounidense y realizar un nuevo trámite. En cambio, el ajuste de estatus fue aprobado en un tiempo récord, marcando un hito en eficiencia migratoria.
La residencia permanente, conocida como “Green Card”, ofrece múltiples beneficios. Permite vivir y trabajar legalmente en Estados Unidos, acceder a programas sociales y educativos, y brinda protección contra la deportación. Además, los residentes permanentes pueden patrocinar a familiares cercanos y viajar internacionalmente, siempre que no excedan los seis meses fuera del país.
Obtener la residencia permanente también es el primer paso hacia la ciudadanía estadounidense. Este estatus puede solicitarse tras cinco años como residente, o tres años si se obtuvo la residencia por matrimonio con un ciudadano estadounidense. Para naturalizarse, es necesario demostrar presencia continua en Estados Unidos, buen carácter moral, y aprobar un examen de civismo y conocimiento básico del inglés.
Abel Zaldívar, el abogado a cargo del caso, señaló que historias como la de Starlin reflejan la importancia de asesorarse adecuadamente en materia migratoria. “Conocer las leyes puede marcar la diferencia entre años de espera e incertidumbre y una resolución rápida y favorable”, afirmó.
La Ley de Ajuste Cubano sigue siendo una herramienta clave para miles de familias que buscan regularizar su situación migratoria en Estados Unidos. Aunque ha sido objeto de debates, su impacto en casos como este demuestra su relevancia y alcance.
Para Starlin, la residencia permanente no solo representa estabilidad legal, sino también la posibilidad de construir un futuro junto a su familia en Estados Unidos, dejando atrás la incertidumbre que marcó su llegada al país.