Inmigrante cubano con cita de CBP One recibe I-220A: ¿Cuáles serían los siguientes pasos?
Un cubano logró una importante victoria en su travesía migratoria tras obtener una cita a través de la aplicación CBP One desde México, presentando su caso de asilo político en la frontera sur de Estados Unidos y recibiendo el formulario I-220A. Este evento marca un momento significativo para la comunidad cubana, resaltando las complejidades y oportunidades dentro del sistema migratorio estadounidense. El abogado Wilfredo Allen y el periodista Daniel Benítez discutieron este caso, arrojando luz sobre las inconsistencias y las posibilidades específicas para los cubanos y sus cónyuges bajo las actuales políticas migratorias de EE.UU.
La situación del migrante cubano resalta una ventana de oportunidad única: al obtener el formulario I-220A, los cubanos pueden solicitar la residencia en Estados Unidos bajo la Ley de Ajuste Cubano después de cumplir un año en el país. Este proceso subraya la especificidad y excepcionalidad de la posición legal de los cubanos en el marco migratorio de EE.UU., diferenciándolos de otros grupos migratorios.
Sin embargo, el tema del asilo introduce una capa adicional de complejidad. Aquellos que entran a EE.UU. por CBP One y solicitan asilo se enfrentan a un sistema judicial donde el juez solo tiene jurisdicción sobre el asilo. Este detalle es crucial, ya que los cubanos, debido a su elegibilidad bajo el Ajuste Cubano, raramente optan por llevar su caso de asilo a corte, prefiriendo esperar el año requerido para solicitar su residencia a través de USCIS.
La explicación ofrecida durante la conversación entre Allen y Benítez es clara: los cubanos y sus cónyuges son los únicos que, con el parole o el I-220A, pueden solicitar la residencia después de un año en EE.UU. Este beneficio no se extiende a migrantes de otras nacionalidades, quienes deben navegar por el complicado proceso de asilo si ingresaron mediante CBP One.
Pese a las oportunidades que este sistema ofrece, existe una notable inconsistencia en el tratamiento del permiso de trabajo. Mientras que a algunos se les otorga un I-94, con la posibilidad de obtener un permiso de trabajo, aquellos con un I-220A no disfrutan de esta ventaja. Esta falta de coherencia evidencia las dificultades y a veces la incoherencia del sistema migratorio estadounidense, generando un ambiente de incertidumbre y frustración entre migrantes y abogados.
La experiencia del abogado Willy Allen en el ámbito migratorio resalta la importancia de la consistencia en la aplicación de la ley para el éxito de los casos legales en EE.UU. La actual imprevisibilidad en el tratamiento de los casos de inmigrantes recién llegados presenta desafíos significativos, subrayando la necesidad de una reforma migratoria que ofrezca claridad y equidad en el proceso.
Este caso ilumina tanto las oportunidades como las complicaciones inherentes al sistema migratorio estadounidense, especialmente para los cubanos que buscan un nuevo comienzo en Estados Unidos. La historia de este migrante cubano no solo refleja su lucha personal, sino que también pone de relieve la necesidad de abordar las inconsistencias y buscar una mayor previsibilidad y justicia en las políticas migratorias de EE.UU.